¿Quién llega mejor?

Se viene el partido más importante del fútbol uruguayo y en esta oportunidad la punta del Torneo Apertura está en juego, a tan solo tres fechas del final.

Este domingo se jugará una nueva edición del partido más importante del fútbol uruguayo. En esta oportunidad, Nacional llega dos puntos abajo de su tradicional rival habiendo perdido cinco de los últimos seis en juego. Por su parte, el aurinegro arremetió y pasó al Decano en esas dos fechas. Si uno mirara estos dos aspectos, se podría llegar a pensar que nuestro rival llega mejor preparado al partido, máxime teniendo en cuenta que le sirven dos de los tres resultados posibles para mantenerse en la punta, lo que genera cierta tranquilidad previa por su lado. Pero, ¿realmente es así? ¿Llega mejor Peñarol al partido?

Lo primero a decir en este aspecto es que si bien los números fríos dicen eso, el juego de los dos equipos no ha sido bueno. Peñarol si bien ganó sus últimos encuentros, ha tenido dificultades y no ha llevado adelante un juego que le permita estar tranquilo en ese aspecto. Tampoco lo hizo Nacional que cometió errores tanto a nivel de jugadores como a nivel cuerpo técnico. Por lo tanto, desde este punto de referencia están parejos. Lo segundo a mencionar es la enorme diferencia que existe a favor del tricolor en lo anímico. ¿En qué me basó para decir esto? Me baso en la confianza que genera la racha positiva que tiene este mismo plantel ante su rival, teniendo incluso diez futbolistas dentro de la nómina que no conoce la derrota clásica hasta el momento. Además de esto, casi en su totalidad los jugadores tricolores tienen saldo favorable en clásicos, a diferencia de Peñarol que tiene todo lo contrario. Si a esto sumamos que hace un año y medio que Nacional no pierde ante su eterno rival, seguramente la autoestima y la confianza estarán más del lado tricolor, lo que a mi entender en este tipo de partidos es un punto a favor. Tomando en cuenta esto entiendo Nacional llega mejor al encuentro, a diferencia de lo que la mayoría de la prensa especializada expresa.

Desde el punto de vista futbolístico, creo que Nacional debería reforzar el medio de la cancha para no pasar dificultades en defensa. Y cuando hablo de defensa, no solo me refiero a la última línea, sino a la función defensiva en su conjunto. El tricolor ha tenido problemas y en parte es por la poca contención en el medio de la cancha, sobre todo por el lado derecho. Esa es la zona a reforzar y creo que Gustavo Munúa así lo entiende, dando ingreso a Sebastián Eguren para ajustar ese aspecto. En cuanto a la estrategia, entiendo debería modificar lo realizado hasta ahora. Los clásicos pasan mucho por el corazón y en general ese aspecto prima por sobre lo futbolístico. La mayoría de los equipos le han agarrado la mano a Nacional y lo han controlado cortando los circuitos, tomando como referencia de marca a Gonzalo Porras, que es quien saca la pelota prolija desde el fondo. De esta manera se le ha dificultado poder desplegar la idea original del técnico. Para esta ocasión sería bueno sorprender salteando la zona media buscando a Iván Alonso por arriba, para que a partir de la recepción de este o buscando la segunda pelota, comenzar los ataques más cerca del arco. 

Por su parte, Peñarol tampoco viene jugando bien. Está dependiendo mucho de las individualidades y no tanto de un juego colectivo. En ese aspecto hay dos jugadores que hay que tomar como referencia de marca. Por un lado Luis Aguiar, que tiene la función de enlazar la última zona con el ataque cuando la pelota está en posesión del equipo. El otro futbolista importante es Diego Forlán, que es el jugador clave, el que puede salirse del libreto y generar peligro cerca del arco rival con tiros de media distancia o pases certeros. Controlando estos dos jugadores, tendremos el control del equipo rival y del partido.

El clásico del domingo será, desde lo futbolístico, un encuentro parejo. Desde lo anímico es que le juego unas fichitas a este plantel que ya nos ha demostrado varias veces que rinde más de lo esperado en clásicos y partidos decisivos. Como ejemplo más cercano está la última final, en la que prácticamente este mismo equipo le pasó por arriba, futbolísticamente hablando, a su rival, dando la vuelta en su cara. Que se dé una nueva victoria que nos permita recuperar la punta y nos encamine a un nuevo campeonato, para seguir siendo el equipo más ganador del fútbol uruguayo. 

Diego Ávalo
decano.com