Faltan capítulos

Habló el asesor de seguridad del club, Dr. Della Valle.

Los encargados de seguridad de Nacional, Wilson Miraballes y Andrés Rodríguez, junto al presidente José Luis Rodríguez, fueron citados a declarar como testigos esta mañana en el juzgado penal de décimo turno de la Dra. Lourdes Sánchez.

Tras el allanamiento en un domicilio de Colón, donde se encontraron 33 banderas y entre las cuales estaba la que había aparecido en el Gran Parque Central en el último partido, fueron detenidos tres personas y se citó a declarar a los mencionados anteriormente junto al referente de la barra, Marcelo “el Sapo” Sosa y su mano derecha.

Por ello es que el programa Tirando Paredes de la 1010 AM se comunicó con el asesor de seguridad del club, Víctor Della Valle, para contar con los detalles de la situación y como se ha procedido hasta el momento.

Para aclarar la situación, Della Valle dijo que “tanto Nacional como Peñarol tomaron medidas para evitar los problemas. Tenemos dos jefes de seguridad, y con los referentes de la barra se confeccionó una lista de 40 colaboradores contratados por el club que ayudan a mantener la seguridad en la tribuna”. Tres de ellos son los que actualmente están detenidos.

Uno de los temas que llamó la atención es que la persona a la que se le allanó el domicilio tiene antecedentes penales pero habían sido absueltos, por lo que también se le consultó al asesor de seguridad. ”Eso fue chequeado por mí. Cuando se manda la lista de 40, Peña nos dice que había 10 o 15 que tenían antecedentes penales. Yo revisé los antecedentes y los eliminamos de la lista, pero también había gente como él, que tenía un antecedente que había sido absuelto, entonces el que tuvo antecedentes hace 10 años no podemos quitarle la posibilidad de reinsertarse en la sociedad y de trabajar.”

También se le consultó por los otros dos detenidos. “Hay uno que le dicen “el Pomelo” pero ni el presidente ni yo lo conocíamos.”

Otro de los rumores que se corren es que había banderas de Peñarol en la sede. “El presidente y varios directivos hicieron una recorrida por el club, fueron al sótano y no había nada en ese momento. Se cambió la cerradura y la llave la tienen sólo tres personas: los dos encargados de seguridad y Marcelo Sosa. Hay un protocolo de que no puede entrar nadie sin el consentimiento de ellos”, aseguró Della Valle.

Ramiro Domínguez