Por Enzo Correa
4 Dic 2020
Declaraciones
Emi
Martínez

Martínez en entrevista contó que el penal “lo venía visualizando hace días”, y de paso reveló que nunca antes había pateado uno.

El volante que le dio la clasificación a cuartos de final al Decano, Emiliano Martínez, habló este jueves por la tarde en el programa Último al Arco de la Sport 890.

El volante contó que se enteró que iba a jugar de titular y que el once se iba a repetir, teniendo en cuenta el que empezó en Quito, el día antes del encuentro, o sea el martes pasado, cuando “Jorge (Giordano) planificó el partido como lo había hecho para la ida”.

Aclaró que no siente dificultad para adaptarse a diferentes puestos. “Siento que me adapto bien a los cambios que quiera hacer el entrenador”, aunque reconoció que donde se siente más cómodo es jugando como “cinco tapón”. Igualmente, expresó que no tiene ningún problema de posicionarse “de interior o de doble cinco, como en el arranque con ‘Rafa’ (García)”.

“Creímos que la íbamos a tener un poco más acá, pero no fue así. Independiente del Valle (IDV) tiene gran equipo, se nota el laburo que tienen. Sufrimos casi todo el partido, pero el equipo, tanto allá como acá siempre estuvo bien parado”, analizó Martínez

Consultado sobre una posible molestia en el segundo tiempo, respondió que “fue un apoyo en falso”, pero que no pasó de un susto.

Por otra parte, aseguró que pateó el quinto penal “porque lo venía visualizando hace días”. Además, se refirió al mensaje que le envió a Gabriel Neves, el cual, según dijo, fue “el día previo al partido”.

“Presentía eso, y cuando veo que se da todo como venía visualizando, no podía salir mal. El equipo también me había mantenido la confianza, y por suerte lo pude meter”, narró.

Además, también sobre el penal, relató que cuando empezaron a decir “falta el tercero, falta el cuarto”, y que cuando el entrenador preguntó “¿quién patea el quinto?”, lo pidió. “El convencimiento era todo mío”, manifestó.

Como dato un poco curioso, contó que nunca antes había pateado un penal. “Nunca, ni en formativas. En baby fútbol pateé uno y lo tiré por arriba”, dijo.

“Me le afirmé tanto a la pelota que quedé en el aire y no di pie”, agregó.

Martínez aseguró que algo que no pudo hacer a la perfección Nacional fue “la presión en los saques de arco de ellos, que, si bien se intentó, lo tenían muy bien trabajado y no se pudo contrarrestar”.

“Me quería morir”, expresó, hablando del lapso de tiempo entre el gol del equipo ecuatoriano y la anulación del mismo. “Además, cuando hacen el gol justo tengo para sacarla y, para hacer que no le pegue y le erre, la punteo, y le vuelve a quedar a él. Pero por suerte el VAR nos salvó”, dijo.

También contó que cuando el juez se comunicaba con el VAR, nunca pensó que realmente fuera a anular. Es más, relató que aún no vio la jugada y no sabe dónde estuvo el offside.

Acerca del video de los festejos de los jugadores de IDV, el volante afirmó que le “molestó bastante porque, como lo dijo ‘Gonza’ (Bergessio) hay que respetar al rival y esas cosas no se hacen, y más a Nacional, con la historia que tiene”. Además, sobre este mismo tema, dijo: “No entendí por qué festejaron, pero hoy la realidad es que estamos en cuartos de final y ellos quedaron afuera”.

“Feli (Carballo) es mi compañero de habitación, y apenas terminó el partido le di para adelante porque lo noté un poco bajoneado”, dijo, y continuó expresando que “es tremendo jugador, por un error no le vamos a hacer la cruz. Le vamos a dar para adelante porque lo necesitamos bien”.

Consultado acerca de quién de los jugadores del próximo rival de Copa, River Plate argentino, le impacta en el juego, respondió que le gustan “Nacho” Fernández y Enzo Pérez.

Otro de los próximos rivales del Decano es Peñarol, se viene el clásico el próximo domingo y Martínez explicó que se siente físicamente “bien, cada vez mejor”.

Recordando el episodio que había sufrido ante Racing en fase de grupos como local, incluso en el mismo arco que se definió esta clasificación, el de la tribuna Abdón Porte, el futbolista aseguró que lo tomó como algo para sacarse “aquella espina”. Para él fue “una revancha personal”.

Enzo Correa




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